sábado, 12 de noviembre de 2016

Reseña de "Invisible" de Paul Auster

 



Título: Invisible
Autor: Paul Auster
Editorial Anagrama, 2009
N.º de páginas: 282





Invisible es la cara de Margot entre la multitud. Invisible, nos dice Walker, es la vanidad que hierve a fuego lento en cada uno de nosotros. Invisibles son los despreciados de la sociedad para los que trabaja Adam Walker. Jim se hace invisible en su libro autobiográfico. Invisible a la luz de la penumbra es el techo de las habitaciones de Adam y Gwyn cuando eran niños. Invisible es su hermano Andy cuando lo recuerdan, “invisible pero respirando”. Invisible en medio de todos los libros de la estantería era esta novela cuando después de comprármelo dude si me gustaría leerlo. Acababa de leer La noche del Oráculo del mismo autor en inglés y me gustó mucho el estilo del escritor pero dude si una novela con un estilo tan personal merecería la pena leerla en castellano. No me ha defraudado. Me ha parecido algo descorazonador por su temática pero su estilo literario es grandioso. Compuesto de cuatro partes, cambia de narradores y utiliza la primera, segunda y tercera persona según los efectos que quiere causar en el lector. Tenemos un libro dentro del libro que permite cuestionarnos la relación que hay entre la ficción y la realidad entre las vidas de los propios personajes, distintas estrategias para un mismo objetivo seducir al lector y mantenerlo intrigado durante toda su lectura.

El protagonista, Adam Walker, es un estudiante de literatura que quiere dedicarse a escribir aunque su vida lo llevará por distintos caminos. En una fiesta de estudiantes conoce a Rudolf Born, un hombre que resultará tener muchas caras, es profesor en la Universidad de Columbia y vive con su pareja Margot, los dos son franceses y establecen con Walker relaciones muy profundas. A lo largo de la novela se irán descubriendo los caminos angostos a los que les conducen los juegos tan peligrosos en los que se mueven. También aparecen otros personajes no menos importantes como Cecile Juin y su madre Helene Juin que nos darán a conocer la calidad humana de unos y otros y Jim, un antiguo amigo de la Universidad de Walker al que le encargará leer y publicar su libro. Recrea distintos ambientes en Nueva York, París, California y en una isla remota del Caribe. Trata temas tan profundos como filosóficos, el sentimiento de culpa, la falta de control frente al deseo, el narcisismo y el libertinaje.

Hace mucho que leí La noche del Oráculo pero recuerdo que mantiene el mismo suspense y conserva el mismo estilo de novela policíaca y de erotismo llevado con sutiliza pero directo. Es una novela escrita con gran habilidad y arte, es una gran lectura que no deja impasible. Invisible se hace visible al lector gracias a la combinación de un estilo moderno con temas clásicos como el bien, el mal, la culpa y la redención. Aconsejo leerla. Ha merecido la pena hacer visible a Invisible ahora brillará en mi estantería como un libro más.